Jean Giraud (Moebius), probablemente el artista de comic más influyente de la historia, nos ha dejado hoy a la edad de 73 años. El creador del teniente Blueberry, Incal o Arzach deja un vacío irremplazable en el mundo del arte, pero nos deja a su vez un legado impresionante, en la forma de una extensísima obra y un universo propio de fantasía y ciencia ficción.
Nacido en París en 1.938, Giraud se dio a conocer en el año 1.964 con el prodigioso "El Teniente Blueberry", para muchos el mejor comic sobre western que jamás se ha dibujado. Influenciado por la etapa que pasó con su familia en México, donde según él conoció el jazz, el sexo y la marihuana y se enamoró irremediablemente del Oeste americano, dibujó hasta tres colecciones de álbumes, primero con guión de Jean Michel Charlier y, a su muerte en 1.989, encargándose él mismo de esa tarea.
A principios de los 70, sin embargo, Giraud sufrió una paulatina transformación hacia el surrealismo y la fantasía que le llevó a cambiar su nombre artístico a Moebius y pasó de retratar el duro paisaje del lejano oeste a dibujar mundos y paisajes oníricos y fantásticos. Fue crucial en este cambio su encuentro con Alejandro Jodorowsky, con el que llegó a crear maravillas como "Arzach" o "El Incal", que dejaron una huella inmortal en su obra.
Fundador de la legendaria revista Metal Hurlant y colaborador de Marvel, para quienes dibujó "Silver Surfer" con guión del gran Stan Lee, su influencia también se deja ver en el mundo del cine. De hecho, sin él, no hubiera habido un "Blade Runner" tal como la hemos podido disfrutar. El propio Ridley Scott reconoció que "The Long Tomorrow" fue una gran fuente de inspiración para la mítica película. Su particular visión del universo también se puede ver en obras como "Alien", "Abyss" e incluso en la segunda trilogía de "Star Wars".
De hecho, como él mismo reconoció, el cine también ha sido para el un gran alimento del que nutrirse para elaborar sus creaciones, llegando a ver de ocho a diez películas por semana durante un largo período de su vida, si bien esta etapa acabó hace largo tiempo: "El cine para mí, para mi uso, ha perdido importancia. De alguna manera, puedo decir que se acabó con la muerte de Sam Peckinpah".
Tras recibir la Orden de las Artes y las Letras de manos de François Miterrand, en los últimos años de su vida se dedicó a la elaboración de "Inside Moebius", una especie de autobiografía visual en la que sus personajes de toda la vida se enfrentan a su creador.
Descanse en sus fantásticos mundos el gran maestro. Se nos va un genio, pero se queda su monumental obra.
0 comments:
Publicar un comentario