Tim Burton es un director que o lo amas o lo odias, no permite medias tintas, un director con un universo y estilo visual propio, su mundo bebe de varias fuentes, desde el expresionismo alemán, pasando por el terror gótico, admirador confeso de Poe y de los films de la Hammer y la Universal, es excelente dibujate y sobra decir que un gran director.
Su filmografía posee grandes títulos y pese a que últimamente ha patinado un poco creo que siendo justos debemos perdonarle, ya que es justo remarcar que nos ha ofrecido más buenas películas que malas y cuando Burton alcanza un gran nivel el resultado está cerca de la obra maestra, véase Eduardo Manostijeras, Sleepy Hollow, Ed Wood o Sweeney Todd.
Pues bien, como ya todos sabéis, Burton está llevando a cabo un remake de un cortometraje suyo que rodó en el año 1984 y que compartía mismo título y evidentemente mismo argumento que el film que nos ocupa, ahora y respaldado por la todopoderosa Disney (que está más que contenta con el trabajo del director tras su descafeinada pero taquillera versión de Alicia en el País de las Maravillas), nos vuelve a traer la historia que dice así:
"Después de perder inesperadamente a su amado perro Sparky, el joven Víctor aprovecha el poder de la ciencia para traer de vuelta a la vida a su querido perro con algunos ajustes sin importancia. Él trata de ocultar su creación pero cuando el nuevo Sparky consigue escaparse tanto los amigos de Victor, como los maestros y compañeros de clase, se darán cuenta de que crear una ‘nueva vida’ puede ser algo monstruoso…"
Recordar que la película está siendo rodada usando la mítica técnica del stop-motion que ya utilizó de manera brillante en La Novia Cadaver y Pesadilla Antes de Navidad (que si bien no dirigió fué el alma de dicho film ya que su influencia rebosaba por cada uno de sus fotogramas).
Aquí os dejo la última imagen aparecida del film, como podéis ver desprende la esencia pura del director lo que es una buena señal.
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