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Bradley Cooper, Zach Galifianakis y Ed Helms pretenden embolsarse la friolera de 15 millones de dólares por su participación en la tercera entrega de "Resacón en Las Vegas", que dirigirá Todd Phillips.
Parece una barbaridad, pero viendo las recaudaciones de las dos entregas anteriores y lo poco (en comparación) que cobraron por ellas, es normal que en esta ocasión pretendan llevarse un trozo más grande del pastel.
Recordemos que la primera película recaudó 467 millones de dólares, de los cuales los protagonistas se llevaron 1 millón cada uno. Para la segunda quintuplicaron su sueldo, pero la recaudación de 581 millones de esta entrega les ha obligado a volver a hacer cuentas y ésta vez han pedido 15 millones cada uno. Veremos si las negociaciones llegan a buen puerto y la Warner accede a firmar sus condiciones. No parece descabellado si nos atenemos a la rentabilidad de la serie.
La película se rodará el próximo verano y esperan poder estrenarla nuevamente para el Memorial Day (día de los caídos, último lunes de Mayo en EEUU).
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