Hoy os traigo una pequeña historia de amor. Una historia de amor incondicional por el que muchos pagarían, pero el amor no se compra. Esta es la historia de Dillie. una hembra de ciervo que ha sido rescatada 8 años atrás, por unos veterinarios de Ohio.
Melanie Butera recibió una llamada de un vecino agricultor a las 3 de la mañana en invierno, preguntando si podría cuidar de un cervatillo recién nacido, cuya madre abandono. Ella respondió que si. Estaba desnutrida y pesaba menos de 2 kilos, así que la pusieron un goteo intravenoso, hasta que dos semanas después se recuperó.
Se dieron cuenta de que ya nunca volvería a ser un animal de granja, ya que el resto de animales la había rechazado por estar tan débil, así que se convirtió en una mascota de la casa. Ademas de todo, ha desarrollado cataratas, así que se guía del perro de la familia para andar por casa y lleva un collar GPS para poder localizarla.
A pesar de todo esto, la familia esta acusada de maltrato por los vicios alimenticios que le dan como piruletas y caramelos, pero miles de personas les apoyan debido a haber salvado al ciervo.
La salvación también es reciproca ya que Melanie que con un cáncer se siente mas viva que nunca y ha escrito un libro con sus experiencias.
Considero que haber salvado a un animal de una muerte segura, no es maltrato ni mucho menos y si es cierto que no tiene una alimentación digna de un ciervo, esta claro que ahora se siente integrada en una familia que si la quiere y la respeta.
A veces no necesitamos mucho mas para sobrevivir que cariño y respeto, la cuestión es que para mucha gente que vive en sus casas acomodados y sobreviven el tiempo para vivir un minuto mas sin ningun otro propósito en la vida, no saben que estos dos seres (Melanie y Dillie) ahora tienen un propósito en la vida y es cuidar uno del otro mientras les queden fuerzas.
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